Hace unos días viví algo que todavía me cuesta creer: me invitaron al brunch del Hotel María Cristina, en Donosti, y después… terminé pintando en una de sus mejores habitaciones.
Fue una de esas experiencias que te sacan de la rutina y te recuerdan por qué haces lo que haces. Como ilustradora y artista en San Sebastián, no todos los días tienes la oportunidad de dibujar desde una suite con terraza, vistas al Kursaal, al Victoria Eugenia y al mar. Un sueño, literalmente.
Me senté allí, con mis acuarelas, entre nervios y emoción, pensando en todas las personas que habrían pasado por esa habitación. Y de entre todas, una me vino clara: Bette Davis. Fue una de las actrices que más veces se alojó en el hotel, tanto que tiene una habitación con su nombre.
Así que cogí el boceto que empecé allí, me llevé conmigo las fotos que saqué, y al volver a casa ilustré su retrato. Es mi forma de conectar con los lugares: observar, sentir, y transformar todo eso en algo que se pueda mirar con calma.
Si te apetece acompañarme en todo el proceso, he subido el vídeo a YouTube (creo que es uno de mis favoritos hasta ahora).
Gracias por estar al otro lado!!
Besarkada bat,
(un abrazo)
Uxue